El secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, confirmó que entre 2009 y 2015, en la planta de Volkswagen, en Puebla, se ensamblaron entre 30,000 y 40,000 vehículos con el software que se manipuló en Alemania para controlar las emisiones contaminantes de las unidades; el funcionario adelantó que este escándalo afectará las exportaciones de México a Estados Unidos que promedian el 26 por ciento del total.
Guajardo, en entrevista para Radio Fórmula con Joaquín López Dórica, comentó que junto con la Secretaría de Medio Ambiente evaluarán los estándares de medición de contaminantes, de acuerdo con las normas en México para de esta forma saber si los dueños de las unidades con motores de diésel, en las cuales se colocó el software manipulado, tendrán que cambiar sus vehículos.
El gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, adelantó que ocurrirá una reestructura en las planta que tiene la empresa en el estado que gobierna; aunque no se afectarán las inversiones ni los planes de expansión en marcha. La armadora alemana, recientemente invirtió 700 millones de dólares para la construcción de la planta donde fabrica su modelo Golf; actualmente está en proceso de construcción otra planta donde armará la Tiguan y que requirió inversión por 1,000 millones de dólares.
El titular de Economía y el gobernador de Puebla coincidieron en que los directivos en México han acudido a las reuniones convocadas por las autoridades federales y estatales para evaluar el impacto del escándalo mundial en México.
Rafael Pacciano, secretario de Medio Ambiente, agregó que esta dependencia y la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) revisarán los certificados de estos vehículos para asegurarse de que cumplen con los estándares ambientales de México, “le hicimos una solicitud formal a la empresa y por escrito donde garanticen que los 39,000 no tienen este sistema”.
Pacciano aseveró que en caso de detectar irregularidades se hará un cálculo para imponer las sanciones correspondientes y que Volkswagen pague las afectaciones a los clientes. Los daños del “fraude mundial” no paran aquí, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) evaluará las estrategias de venta a las que recurrió la empresa para comercializar estas unidades y en caso de ser necesario “iniciar la acción colectiva correspondiente” que tiene carácter jurídico.
Fuente: CAAAREM