El Ministerio de Comercio dijo en un comunicado que impondría aranceles adicionales de un 5% o un 10% sobre un total de 5,078 productos originados en Estados Unidos.
China anunció este viernes aranceles de represalia adicionales sobre 75,000 millones de dólares en productos estadounidenses y restableció los gravámenes sobre productos automotrices estadounidenses.
Por una parte, tarifas de 5 o 10% entrarán en vigor en dos fases: a partir del 1 de septiembre y desde el 15 de diciembre, informó el Ministerio de Finanzas de China en un comunicado.
Esas fechas corresponden exactamente a los días en que entrarán en vigencia los últimos aranceles autorizados por el presidente Donald Trump sobre 300,000 millones de dólares en productos chinos.
Por otra parte, un arancel del 25% sobre automóviles y un arancel del 5% sobre autopartes entrarán en vigencia el 15 de diciembre.
“Las medidas de los Estados Unidos han llevado a la escalada continua de las fricciones económicas y comerciales chino-estadounidenses, que han perjudicado en gran medida los intereses de China, Estados Unidos y otros países, y también han amenazado seriamente el sistema multilateral de comercio y el principio del libre comercio”, dijo el Ministerio de Finanzas.
Ya China cobraba aranceles a productos de Estados Unidos por unos 84,000 millones de dólares (derivados de la Sección 301), los cuales entraron en vigor en tres etapas.
En 2018, Estados Unidos exportó productos al mercado de China por un valor de 120,000 millones de dólares y registró importaciones originarias de ese país por 563,000 millones de dólares.
El gobierno chino agregó que la adopción de medidas arancelarias por parte de China es un movimiento forzado para enfrentar el unilateralismo y el proteccionismo comercial de Estados Unidos.
La parte china reitera una vez más que para China y Estados Unidos, la cooperación es la única opción correcta, y una situación de ganar-ganar puede conducir a un futuro mejor.
“Se espera que China y Estados Unidos se respeten mutuamente, con igualdad mutua, palabras y confianza, y con palabras y hechos resuelvan las diferencias de una manera mutuamente aceptable”, dijo.
Asimismo externó que espera que ambas potencias construyan activamente un nuevo orden económico y comercial chino-estadounidense “equilibrado, inclusivo y beneficioso”, y salvaguarden y promuevan conjuntamente reformas y mejoras al sistema multilateral de comercio.
El pasado 1 de agosto, Trump anunció que impondrá aranceles adicionales del 10% sobre importaciones de productos chinos valorados en 300,000 millones de dólares.
Mientras tanto, continuarán las negociaciones entre ambas potencias con el objetivo de dar fin a esta guerra comercial.
“Las negociaciones comerciales continúan, y durante las conversaciones Estados Unidos comenzará, el 1 de septiembre, a imponer un pequeño arancel adicional de 10% en los restantes 300,000 millones de dólares de bienes y productos procedentes de China a nuestro país”, dijo Trump entonces a través de Twitter.
Por ese mismo medio, Trump atacó a China por no cumplir con las promesas de comprar más productos agrícolas estadounidenses y criticó personalmente al presidente Xi Jinping por no hacer más para detener las ventas del opioide sintético fentanilo.
Estados Unidos aplicó desde el 10 de mayo de 2019 un arancel de 25% a productos importados desde China con un valor anual de casi 200,000 millones de dólares. Ya a esa misma canasta de productos se les cobraba un arancel de 10% desde el 24 de septiembre de 2018.
El aumento de aranceles fue autorizado por Trump, bajo la Sección 301 de la Ley de Comercio de 1974 de Estados Unidos, uno de los principales medios legales por los cuales ese país aplica los derechos estadounidenses bajo acuerdos comerciales y aborda las barreras extranjeras “desleales” a las exportaciones estadounidenses.
Las sanciones bajo la Sección 301 contra China se han aplicado en tres etapas. La primera, en vigor desde el 6 de julio de 2018, consistió en fijar un arancel de 25% sobre 818 productos chinos importados con un valor anual de 32,300 millones de dólares.
Subsecuentemente, Estados Unidos instrumentó la segunda etapa, estableciendo un arancel del 25% sobre 279 productos chinos importados, con un valor anual de 13,700 millones de dólares, vigente desde el 23 de agosto de 2018.
Por último, la tercera etapa, vigente desde el 24 de septiembre de 2018, fue instrumentada primero con el arancel del 10% sobre 5,745 productos chinos importados por Estados Unidos con un valor de 188,900 millones de dólares, y luego, a partir del 10 de mayo, con un arancel de 25% a la misma canasta.
Fuente: El Economista