Rechazo, preocupación e incluso decepción, así respondió el mundo a la medida proteccionista –y retrógrada para algunos- tomada por el gobierno de Donald Trump, en la que impone aranceles a las importaciones de acero y aluminio de sus principales socios comerciales, bajo el pretexto de preservar su seguridad nacional.
De acuerdo con lo planteado el jueves por el Secretario de Comercio, Wilbur Ross, desde el primer minuto de este 1 de junio Estados Unidos cobra un 25% de arancel a las importaciones de acero y 10% al aluminio provenientes de México, Canadá y la Unión Europea, una decisión que aviva el temor de una guerra comercial de mayores proporciones.
Las represalias no se hicieron esperar. Tanto México como Canadá anunciaron de manera individual medidas espejo, equivalentes al nivel de la afectación. La Unión Europea también prepara su contraataque.
México, por su parte, impondrá aranceles a diversos productos como aceros planos (lamina caliente y fría, incluidos recubiertos y tubos diversos), lámparas, piernas y paletas de puerco, embutidos y preparaciones alimenticias, manzanas, uvas, arándanos, diversos quesos, entre otros, según informó la Secretaría de Economía, sin especificar algún monto.
Canadá lo hará con productos como whisky, jugo de naranja, acero y aluminio, por un monto de hasta 12 mil 800 millones de dólares (mdd), de acuerdo con la canciller Chrystia Freeland.
Sin embargo, ninguno de los socios de Estados Unidos en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) renunció al diálogo para continuar con las actuales negociaciones comerciales, detenidas a últimas fechas.
…POR LA CULATA
Para algunos esta medida le costará más caro a Estados Unidos.
En cifras generales, los aranceles establecidos por el gobierno de Trump representan para el sector siderúrgico mexicano un impacto de dos mil mdd anuales, mientras que en materia de siderurgia el superávit de Estados Unidos con México en los últimos dos años es de 3.6 billones de dólares, de acuerdo con la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero).
“(…) muestra que las medidas espejo afectarán más que beneficiar a la industria de Estados Unidos. En esta materia somos una región totalmente integrada, donde el 76% de las exportaciones del acero de Estados Unidos se envía a México y Canadá”, precisó el organismo empresarial en un boletín de prensa.
La industria manufacturera y maquiladora de exportación instalada en el país no observa una afectación directa hasta el momento, aunque demandó que las medidas que se tomen no encarezcan la competitividad de las cadenas de valor construidas entre los tres países.
“Lo que más nos preocupa ante esta medida unilateral es el mensaje que manda el gobierno de Estados Unidos y que enrarecerá y distanciará más las posibilidades de llegar a acuerdos de esta modernización del TLCAN”, dijo Luis Aguirre Lang, Presidente de index Nacional, en conferencia de prensa telefónica.
LOGÍSTICA Y TRANSPORTE
El sector del transporte y la logística debe estar alerta ante las repercusiones indirectas que se presenten en el mercado, ante una posible disminución en el movimiento de los productos afectados por el aumento en su costo, consideró Felipe de Javier Peña Dueñas, Presidente de la Comisión de Transportes de la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (Concamin).
“Necesitamos fortalecer nuestra cadena logística”, dijo.
Uno de los principales clientes del aluminio y del acero son los productores de autobuses, camiones y tractocamiones instalados en el país, quienes respaldaron las medidas tomadas por el gobierno mexicano, aunque consideraron que podría haber una afectación debido a las cadenas de valor que se han desarrollado entre México y Estados Unidos.
En tanto, “se analiza qué efecto pudieran generar” las medidas adoptadas por Estados Unidos, Miguel Elizalde, Presidente de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (Anpact), indicó que es momento de impulsar la proveeduría y las ventas en el mercado interno.
Una presión para la administración de Donald Trump será la reacción de los productores de Estados Unidos que se verán afectados por las represalias de México y Canadá. “Ellos deben contribuir a presionar a su gobierno para que modifique esta decisión”, comentó Refugio Muñoz, Vicepresidente de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga.
Mientras esto sucede, la aplicación de aranceles será en detrimento de sectores clave de los tres países, afectando a sus cadenas de valor, a sus trabajadores y especialmente a los consumidores de las naciones, de acuerdo con la Cámara de Comercio Internacional (ICC por sus siglas en inglés) en México.
“El intento de intimidación a socios y aliados en negociaciones clave, no es el camino. Es urgente que la administración Trump actúe en forma responsable, reconociendo en primer lugar que el TLCAN ha traído paz y crecimiento sin precedentes para las tres naciones” insistió.
DATA
En 2017 sólo el 1.2% del total de importaciones que Estados Unidos realizó desde otros países correspondió a acero, las cuales provinieron principalmente de Canadá (17.9%), Corea del Sur (9.6%), México (8.6%) y Brasil (8.4%), de acuerdo con información del Departamento de Comercio de Estados Unidos.
En ese mismo año, el total de importaciones de aluminio representó apenas el 1% del total de importaciones estadounidenses, de las cuales provinieron principalmente de Canadá (37.12%), China (14.78%), Rusia (6.96%) y México (4.4%).
Fuente: T21